miércoles, 6 de septiembre de 2017

HISTORIA DEL PERÚ

Los Incas (1450 - 1553)


Durante el Intermedio Tardío proliferaron pequeñas organizaciones curacales, llamadas señoríos por los investigadores, por los toda el área andina. Si bien durante esta misma época estos señoríos coexistieron con organizaciones más complejas como los Chimú, ninguna resaltaba en especial, a no ser por ciertos vestigios anecdóticos y particulares de la zona andina. Nada hacía presagiar que de entre estos curacazgos, uno del Cuzco se haría el más famoso de todos: el de los Inca.

Resultado de imagen para incas
Los Inca para el siglo XII eran un pequeño grupo tribal que ocupaba la cuenca del Cuzco, evolucionando hacia señorío a inicios del siglo XIV y formando un Estado recién para el siglo XV. Fue allí que grupos como los Chanca empezaron a constituir una amenaza. Al parecer se libró una batalla, con lo cual se refuerza una idea de un grupo preparado para la guerra, el cual después sería uno de los principales caracteres de la expansión: administrativa, militar y cultural. Este carácter bélico de los Incas puede encontrar su origen en la expansión Huari, en su intento por conquistar el valle del Cuzco, mantuvo a la etnia originaria de los Inca en una alerta constante. Esto los fortaleció y les permitió atacar a los Chanca. Pero no sólo esto recibieron de los Huari, pues también aprendieron de su tipo de organización, la cual después reprodujeron a gran escala en el Tahuantinsuyo. 

Lamentablemente no contamos con información confiable para relatar cómo fue esta expansión incaica, quedándose la historia trunca, entremezclada con el mito y con la leyenda. El trabajo de los arqueólogos en este sentido está en deuda, más aun si se cuenta con gran número de vestigios arqueológicos, como en este caso.

Resultado de imagen para incasTentativamente, los investigadores han usado las siguientes fechas para delimitar el desarrollo de los incas: Hacia el año 1200 d.C. se estableció el Estado Inca, en 1438 aproximadamente ocurrió la coronación de Pachacútec, y de ahí habría comenzado la vertiginosa expansión incaica hasta el momento de la llegada de los españoles, en 1532.

De los Huari heredaron una organización muy compleja, los caminos, las construcciones de piedra y por sobre todo la idea imperial. De los Chimú, quizá la cultura más poderosa y compleja hasta su contacto con los Incas, heredaron la divinización del mandatario y de su entorno, y la existencia de una jerarquía administrativa. El tema de la dualidad incaica lo encontramos en una tradición que no puede ser atribuida a una sola etnia, y parece que fue una institución bastante arraigada del área andina.

Para finalizar queremos enfatizar que si bien los Incas recibieron gran parte de las tecnologías e instituciones que luego utilizó y expandió, el enorme territorio que lograron administrar política y comercialmente, así como los impresionantes monumentos que han hecho a esta cultura mundialmente famosa, es prueba de una sorprendente capacidad organizativa que va más allá de la simple reproducción de tecnologías e instituciones. En ese sentido los Incas no copiaron, sino aprovecharon lo aprendido para mejorarlo y potenciarlo. 


La Conquista 

La gran rebelión Inca
Resultado de imagen para guerra civil inca

Durante siglos hemos creído las crónicas españolas que relatan la historia de la aniquilación del Imperio Inca a manos de un pequeño grupo de conquistadores. Pero ahora disponemos de nuevas pruebas que nos ayudarán a reescribir la Historia. Por primera vez, las pruebas físicas apuntan que la conquista española de los Incas podría haberse llevado a cabo durante un periodo de tiempo mucho más largo de lo que se pensaba, y que los conquistadores recibieron la ayuda de los aliados indios. National Geographic descubre la verdad detrás de los últimos pasos del pueblo Inca, nos muestra una saga épica de luchas de guerrillas y rebelión.

La Conquista del Perú (I)

40 años después de la llegada de Colón al nuevo mundo Francisco Pizarro llega al Perú. Desembarca primero en Tumbes y luego navega hasta Chan Chan, luego decide regresar a España para armar una expedición capaz de conquistar al Imperio Inca. Mientras tanto se comenzaron a propagar las epidemias, como la viruela, que habían sido contagiadas por los españoles. El Inca Huayna Cápac fallece y su esposa nombra como sucesor a Huáscar. La mayoría no quería a Huáscar y apoyan a Atahualpa para que tome el poder.


La Conquista del Perú (II)

Atahualpa logró dominar la cruenta guerra civil entre los Incas y obtuvo una trabajosa victoria, esto ocurría en el año 1,532. Atahualpa fue informado del regreso de los españoles y decide esperarlos en Cajamarca, suspendiendo su viaje de regreso al Cusco. Pizarro desembarca nuevamente en Tumbes y se dirige por tierra hacia Piura. Allí recibe a un emisario de Atahualpa que les da la bienvenida. Pizarro le entrega regalos para Atahualpa antes de seguir con su marcha hacia Lambayeque lugar donde nuevamente se encuentra con el emisario que le trajo regalos de Atahualpa. Invita a Pizarro a ir a Cajamarca ya que habían urdido un plan para apoderarse de los caballos de los españoles. Estos llegaron a la plaza de Cajamarca y Francisco Pizarro envía a Hernado de Soto y Hernando Pizarro a conversar con Atahualpa en los baños del Inca para invitarlo a la plaza a reunirse con él. Se comunicaban a través de 2 intérpretes, 
Felipillo y Martinillo, dos indios adolescentes que habían sido raptados en el viaje anterior.


La Conquista del Perú (III)

Atahualpa ingresó a la plaza de Cajamarca cargado en andas y la encontró vacía y al rato ingresó el dominico Vicente de Valverde acompañado de Felipillo. Atahualpa le dio al dominico  un quero de oro con chicha para brindar y comenzar una conversación. Valverde se asustó, pensando que lo querían envenenar y arrojó la chicha al suelo, leyó unos pasajes de la biblia que Atahualpa no entendió y cuando le entregaron el libro de la biblia, Atahualpa lo arrojó al suelo. En ese momento Valverde da una señal e ingresa la caballería española a la plaza llevando un cañon y varios aracabuses. Se produjo una masacre de indios, que estaban desarmados, y Atahualpa fue capturado y hecho prisionero.



La Conquista del Perú (IV)

Resultado de imagen para españoles e incas alianzaLuego de la captura de Atahualpa, los españoles recibieron refuerzos con la llegada de Diego de Almagro con una nueva tropa. Ellos presionaron para asesinar a Atahualpa y fue ahorcado con el garrote. Durante la prisión del Inca, los españoles habían recibido la visita de los curacas cañaris, chachapoyas y huancas para sellar una alianza contra Atahualpa. Estos 3 grupos fueron claves para la conquista porque guerrearon a favor de los españoles. La conquista fue obra de una partida de soldados empresarios funcionando como avanzada del imperio español que se hallaba viviendo una gigantesca expansión en todo el planeta.



Las Encomiendas

Las encomiendas en la época colonial era un sistema que fue empleado principalmente por la corona española durante la colonización de las Américas para regular el trabajo de los indios americanos.

¿Que son las Encomiendas?  Mediante las encomiendas la corona española concedía a una persona un número determinado de indígenas los cuales estarían bajo su responsabilidad. En teoría, la entega de encomiendas a los españoles estaba destinada a proteger a los nativos de las guerras entre tribus y para instruirlos en el aprendizaje del idioma español y para que adoptaran la fe católica: en contribución los indígenas debían tributar en forma de trabajo, oro u otros productos. Pero en la práctica la diferencia entre la encomienda y la esclavitud podría ser mínima. Los nativos mediante las encomiendas coloniales fueron obligados a realizar trabajos forzados y fueron sometidos a castigos extremos y a la muerte si se resistían.

En el antiguo Imperio Inca e incluso en el periodo pre-incaico las tradiciones de la extracción de tributo bajo la forma de trabajo eran también sistemáticas.

¿Quienes eran los encomenderos?
Los beneficiarios de la encomienda eran por lo general los primeros conquistadores y soldados españoles que llegaron el continente americano, pero también incluyó a algunas mujeres y a notables indígenas que se aliaron con la corona. Por ejemplo, a doña Marina y las hijas de Moctezuma (emperador del Imperio Azteca) se les concedió extensas encomiendas como dote. Los gobernantes incas establecidos después de la conquista española también solicitaron y obtuvieron encomiendas de la corona. El estado de seres humanos como parte de un encargo o dependencia bajo el sistema de encomienda colonial sirvió para "definir el estado de la población India": los nativos eran hombres libres, no esclavos o siervos. A los conquistadores europeos se les concedió la tutela de los pueblos indígenas que ayudaron a conquistar. La encomienda era esencial para la corona española para mantener su control sobre el Norte, Centro y Sur América en las primeras décadas después de la colonización, ya que fue la primera ley orgánica principal instituida en un continente donde reinaba la enfermedad, la guerra y la agitación. En un principio el sistema de encomienda fue ideado para satisfacer las necesidades de las economías agrícolas en el Caribe. Más tarde se adoptó para la economía minera del Perú, y del Alto Perú. Las encomiendas se extendieron desde el comienzo del siglo XVI, año donde se inicio la Conquista del Perú, hasta el siglo XVII.

En Filipinas, la encomienda fue otorgada también a los nobles locales (principalía), a través de la ley promulgada por Felipe II, el 11 de junio de 1594. 

Historia del surgimiento de la Encomienda

La etimología de la palabra encomienda y encomendero reside en el verbo español encomendar, que significa "confiar algo". La encomienda se baso en la conocida institución de la Reconquista Española en la que a los Adelantados se les otorgaba el derecho para extraer el tributo de los musulmanes o de otros campesinos en las zonas que habían sido conquistadas y reasentadas.

El sistema de encomienda colonial difiere de la institución Peninsular ya que los Encomenderos no eran propietarios de la tierra en que vivían los indígenas. El sistema no dio lugar a una tenencia de la tierra directa por parte del encomenderos españoles, las tierras indígenas se mantuvieron en teoría en poder de los naturales. Este derecho estuvo protegido oficialmente por la Corona de Castilla desde el comienzo de la conquista. El sistema fue abolido formalmente en 1720, pero ya había perdido su eficacia desde mucho antes. En muchas áreas, ya había sido abandonado por otras formas de trabajo. En algunas zonas, este sistema casi feudal persistió. En México, por ejemplo, no fue sino hasta la reforma constitucional después de la Revolución Mexicana que el sistema de la encomienda fue abolida, y el ejido se convirtió en una entidad jurídica de nuevo.
Establecimiento de la encomiendas

En 1503, La corona española comenzó a conceder encomiendas legalmente a los soldados, conquistadores y funcionarios. El sistema de encomiendas fue utilizado por la Corona para la organización de los indígenas en pequeños asentamientos conocidos como reducciones, en respuesta al crecimiento decreciente de los indígenas. Cada REDUCCIÓN tenía a un jefe nativo responsable de hacer el seguimiento de los trabajadores en su comunidad. El sistema de la encomienda no otorgaba la tierra a las personas, pero de forma indirecta ayudaba en la adquisición de tierras por parte de los colonos. Los encomenderos se familiarizaron con las tierras de los indígenas, que estaban bajo su tutela, y quisieron apoderarse de ellas a través de medios legales o extra legales, cuando surgía alguna oportunidad. Como inicialmente estaba definido, el encomendero y su heredero solo se beneficiarían de la concesión durante dos generaciones, sin embargo, esto no era a menudo el caso, especialmente si el heredero prestado algún servicio a la corona. El sistema de la encomienda llegó finalmente a su fin legal en el año 1720, cuando la corona hizo un nuevo intento de erradicación de la institución conocida como ENCOMIENDA. Los encomenderos ahora estaban obligados a pagar a los indígenas por su trabajo realizado.

Inicialmente, las encomiendas deberían devolverse a la corona después de dos generaciones , sin embargo, esto se pasó por alto con mucha frecuencia. En 1574, el Virrey del Perú Diego López de Velasco investigó las encomiendas y llegó a la conclusión de que había 32.000 familias españolas en el Nuevo Mundo, y que 4.000 de los cuales tenían encomiendas. Había 1.500.000 de nativos que pagaban tributo, y 5 millones de indígenas "civilizados". 

La frase "sin indios no hay Indias (América)" popular en el continente americano, especialmente en el siglo XVI, hace hincapié en la importancia económica y el atractivo de esta mano de obra, incluso por encima de la de los metales preciosos u otros recursos naturales. 
Abolición de las Encomiendas

La caída del sistema de la encomienda se inició ya en 1510, cuando los misioneros dominicos comenzaron a protestar contra el abuso de los indígenas en manos de los colonizadores españoles. En 1538, el emperador español Carlos V se dio cuenta de la gravedad de la situación por la rebelión de los taínos y se vio obligado a hacer cambios en las políticas sobre el trabajo de los indios. La corona hizo dos intentos fallidos para poner fin a los abusos del sistema de la encomienda, a través de la Ley de Burgos y Leyes de Indias.
El sacerdote español y ex encomendero, Bartolomé de las Casas, se sometió a una profunda conversión después de ver el abuso hacia los nativos. Dedicó su vida a escribir y ejercer presión para abolir el sistema de la encomienda colonial que esclavizaba de manera sistemática a los nativos del Nuevo Mundo. Las Casas participó en un importante debate en el que impulsó la promulgación de las Leyes Nuevas y el fin del sistema de las encomiendas en América. Las Leyes de Burgos (1512-1513) y las Leyes Nuevas (1542) fracasaron debido a oposición colonial y, de hecho, las Nuevas Leyes sobre las indias se aplazaron en el Virreinato del Perú.

Cuando Blasco Núñez Vela, primer virrey del Perú, trató de hacer cumplir las Leyes Nuevas, que prevé la supresión gradual de la encomienda, muchos de los encomenderos no estaban dispuestos a cumplir con ello y se rebelaron contra Núñez Vela. Sin embargo, la encomienda fue reemplazada gradualmente por los llamados REPARTIMIENTOS en toda la América española a partir de mediados de siglo XVII.

Surgimiento de los Repartimientos de Indios 

El sistema de la encomienda fue sucedido por los también abusivos REPARTIMIENTOS DE INDIOS gestionados por la corona, en la que los trabajadores fueron contratados directamente por los dueños de la hacienda. Al igual que la encomienda, el Repartimiento no incluyó la atribución de tierras a nadie, sólo la asignación de trabajadores nativos. Pero ellos fueron asignados directamente a la Corona, que, a través de un funcionario local los asignaba para trabajar para los colonos por un período de tiempo determinado, generalmente varias semanas. El repartimiento fue un intento de "reducir los abusos de trabajo forzosos". Como el número de indígenas había disminuido las actividades mineras fueron reemplazados por las actividades agrícolas en el siglo XVII, la hacienda surgió debido a que la propiedad de la tierra se volvió más rentable que la adquisición de mano de obra.

La Esclavitud en el Perú




El Virreynato en el Perú

Resultado de imagen para virreinatoEl ordenamiento legal que se realizó entre los dos grupos poblacionales de mayor número (indios y españoles) caracterizó la vida colonial en los dos virreinatos americanos. La separación en dos repúblicas tuvo varias razones. La primera fue de carácter económico: para una mejor tributación los indígenas debían estar censados y "reducidos" en pueblos o rancherías cercanas a alguna parroquia. El conocimiento exacto de su número permitía al corregidor establecer las formas del tributo (si es que debían ir a la mina, o debían pagar en especias o contante). El problema con este registro es que no fue exacto debido a que muchos indios huían de sus reducciones o se hacían pasar por mestizos para evitar el pago. Hay que tener en cuenta que las enfermedades diezmaron a la población indígena a tal punto que hubo pueblos enteros que fueron devastados por la viruela, sarampión disentería, etc.; especialmente en las zonas costeras (costa atlántica y la del pacífico de México y en la costa del virreinato peruano), por lo que la tributación fue excesiva en muchos casos, debido a que los sobrevivientes debían cargar con el tributo de los muertos.

La población más numerosa de ambos virreinatos fueron los indígenas (pertenecientes a la república de indios). Estos eran considerados legalmente como menores de edad, por lo que no podían ser juzgados ni tomados en cuenta como testigos. Las leyes de Indias protegieron a los descendientes de los Incas y a las familias "nobles" o panacas del antiguo Tahuantinsuyo. Esta parte de la población indígena estaba exenta del tributo. Por ello muchos indígenas hicieron grandes fortunas comerciando (algunos productos vernaculares como el olluco, la oca, camote, etc. estaban igualmente libres de impuestos), o con el arriaje de mulas de carga. Con las reformas borbónicas (durante la década de 1770) fueron aplicados impuestos a los productos indígenas, originando rebeliones y revueltas en ambos virreinatos. 
Resultado de imagen para virreinatoLa república de españoles estaba conformada por los peninsulares llegados a América y sus descendientes directos: los criollos. En un primer momento a la cabeza de esta república debieron estar los encomenderos, grandes terratenientes y los funcionarios públicos, como los oidores, corregidores y el virrey. Con el tiempo, los encomenderos fueron suplantados por personajes de mayor jerarquía, poseedores de títulos nobiliarios (condes, marqueses y hasta algún "grande" de España). La mayor cantidad de hombres y mujeres con títulos se concentró en el virreinato de la Nueva España. De igual manera, las familias más pudientes se concentraron en la ciudad de México, Oaxaca, Guanajuato y Veracruz. En Lima se concentraba una pequeña porción de hombres adinerados, resultantes de matrimonios estratégicos entre familias pudientes. La compra de cargos públicos daba igualmente prestigio, pero ello pauperizó el sistema administrativo colonial pues se entregaban al mejor postor y no importaba si es que sería el comprador adecuado para el cargo o no. La necesidad de fama y riquezas era todavía una herencia medieval. Se buscó perpetuar los cargos nobiliarios con la familia, así como con tierras y propiedades que generalmente se encontraban en mayorazgo (por lo general dadas al hijo mayor). No se debe olvidar que México poseía el mayor número de nobles y "ricos" de todas las colonias españolas en América debido en gran parte por el boom minero que experimentó en los siglo XVII y XVIII. En cambio el virreinato peruano no llegó a tener mas de 300 nobles cuyo máximo caudal llegó a ser 120 000 pesos por casa familiar (cifra sumamente baja si se compara con el promedio mexicano: 600 000 pesos por familia noble). Ingresar a una casa de caballería confería una posición de privilegio. Las más importantes fueron las de Calatrava, San Juan de Jerusalén, Alcántara y Santiago. 


Bibliografia

http://educared.fundaciontelefonica.com.pe/sites/peru-prehispanico/incas.htm

http://s2.accesoperu.com/clientes/elaviso/historia_peruana_03.htm

http://www.historiacultural.com/2012/04/encomiendas-coloniales-america.html

https://www.youtube.com/watch?v=w2ABJYZWXlI

http://educared.fundaciontelefonica.com.pe/sites/virreinato-peru/sociedad.htm


No hay comentarios:

Publicar un comentario